La última canción de Federico Gerhardt, «Gira la rueda», con la participación de Diego Lopez en la voz, es un cautivador tema de FreeStyle-rap que profundiza en las complejidades de las luchas de la vida y el poder de la resiliencia. La letra pinta un cuadro vívido del tablero metafórico de la vida, con piezas desplazadas y miradas olvidadas en el juego de la calle, resaltando las historias no contadas en los ojos de aquellos al margen. Estos poderosos versos sirven como recordatorio de las batallas invisibles y los guerreros silenciosos entre nosotros.
El estribillo, «Somos voces en el viento, buscando ser escuchadas», resuena como un llamado a ser oído en el freestyle de la vida, donde las rimas de uno son tan afiladas como espadas. Anima a los oyentes a mantener la cabeza alta y dejar que su luz interior brille, prometiendo que en esta batalla, sus historias serán cantadas. Este estribillo no solo engancha al oyente, sino que también encapsula el tema de la lucha y la expresión en un paisaje urbano.
En la segunda estrofa, las letras de Gerhardt continúan explorando temas de percepción y resiliencia, retratando a un protagonista que ve el mundo en colores vibrantes, percibe espacios inmensos donde otros ven barreras, y alberga sueños vastos sin necesidad de palabras. Esta capa narrativa añade profundidad al tema, ilustrando el potencial dentro de cada individuo para trascender su entorno.
El puente amplía el alcance de la canción, destacando la presencia omnipresente de la creatividad y la ambición en cada esquina y sombra de la ciudad. Es un recordatorio de que el objetivo no es encajar, sino tallar el propio espacio e identidad únicos.
«Gira la rueda» destaca por su lírica poética y la entrega dinámica de Diego Lopez, cuya voz añade profundidad y urgencia al mensaje. El tema es más que una canción; es un himno para los pasados por alto, una voz para los sin voz y un testimonio de la voluntad indomable del espíritu humano. Gerhardt y Lopez han creado una pieza que no solo entretiene, sino que también inspira, haciendo de «Gira la rueda» una adición significativa al género FreeStyle-rap.